La verguenza del filósofo. Formas de (no) pensar danza en Maurice Merleau-Ponty
Resumen
A partir de la noción de “mundo vivido” y siguiendo el rastro de unas palabras escuchadas al azar, me propuse indagar acerca del “cuerpo vivido” del filósofo, es decir: ¿Qué relaciones podemos establecer entre su práctica filosófica y sus experiencias danzadas? Y, a través de esta pregunta, ¿de qué nos hablaba Merleau-Ponty cuando nos hablaba de danza? Esta segunda pregunta es fundamental, porque señala un problema metodológico que aparece una y otra vez en los textos teóricos y en las historiografías que estudian danzas, me refiero a la insistencia por el intento de señalar y definir aquello que “la” danza “es” como si de una unidad (lógica, estética o conceptual) se tratara. El problema fundamental de dicha tendencia, es que aplana la complejidad, borra las diferencias y desconoce la variabilidad de formas de conocimiento que las prácticas de movimiento desarrollan como tales, alianza que con la presente investigación pretendo consolidar.